"Se trata de mirar distinto y creer que nada es imposible"
IMA SANCHÍS - 25/11/2009
LA CONTRA DE LA VANGUARDIA
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44 años. Nací y vivo en Barcelona. Tengo pareja. Soy autodidacta. Trabajé como fotógrafo en una revista erótica, vendedor de enciclopedias, guitarrista, compositor, camarero. Dirijo una agencia creativa. Se deben votar ideas y no partidos. Creo que hay algo más de lo que vemos.
¿Es usted el inventor de la lavadora para hombre?
Alguien tenía que hacerlo.
¿Cómo funciona?
Tiene un sensor de huellas dactilares. Se programan las huellas de él y las de ella y el sistema no permite que la misma huella lo conecte dos veces seguidas.
... Y fue usted portada de The Wall Street Journal.
La repercusión que tuvo superó lo imaginable: aparecí en tres mil medios y pico en más de 59 países. Muchos de los inventos que desarrollamos en el estudio no están destinados a la producción comercial, sino a lanzar un mensaje o llamar la atención.
Pues lo consiguió con creces.
El suelo inteligente para cocinas que te ayuda a hacer dieta es otro ejemplo. Un fabricante de cerámicas nos contrató para que explicáramos cómo la tecnología se podía aplicar a la cerámica y desarrollamos una baldosa que detectaba el peso de la persona, la hora del día y el tiempo que permanecía encima de la baldosa, es decir, delante de la nevera. Automáticamente, lanzaba un mensaje: "Vigila esos kilitos, no te rindas".
¿. ..?
La aplicación seria sería detectar frente a la ducha posibles caídas en gente mayor.
Hábleme de la puerta inteligente para desmemoriados.
La ideamos para una inmobiliaria que quería dar un valor añadido a la domótica. Incorporamos pequeños microchips a los objetos personales más olvidados - la cartera, las llaves, el móvil, las gafas...-,de manera que, cuando sales, la puerta te avisa: "Ojo, que te dejas las llaves".
¿Le da usted la vuelta a todo?
Se trata de mirar de otra manera y de tener claro que no hay nada imposible. Por ejemplo: ¿qué pasa con las postales?
Que las lee todo el mundo.
Por eso inventamos las postales rasca-rasca. Unas pegatinas que se adhieren sobre el texto para preservar la privacidad.
Acaba de recibir seis premios por cinco productos.
Sí, en el British Invention Show, la feria de invención más reconocida de Gran Bretaña. Una medalla por el trapo de cocina imantado (que permite lanzarlo y que se pegue en la nevera, el horno o el lavavajillas); otra por las sábanas afrodisiacas...
¿Qué es eso?
Expopyme, feria de la pequeña y mediana empresa, quería llamar la atención de los empresarios, así que nosotros decidimos fijarnos en las personas que los sufren.
¿Sus señoras y novias?
Un estudio de la Universidad de Gutenberg, Alemania, decía que los empresarios tenían poco sexo, así que encapsulamos en las fibras del tejido de las sábanas partículas de nanotecnología de un principio afrodisiaco que te entra por los poros y lanzas a Larsson por los aires, ¡basta de literatura sueca!
¿Y no están a la venta?
Llamó tanta gente pidiéndolas que hemos decidido fabricarlas. Soportan 25 lavados, luego pasan a ser unas sábanas normales.
Sigamos con las medallas...
La postal rasca-rasca, el recogedor con peine para sacar la pelusilla de la escoba, y la baldosa inteligente. La sexta nos la dio la delegación rumana por ideas destacadas. Para la autoestima fue estupendo.
¿Cuál es su invento sueño?
Una escuela de invención donde se enseñe a los niños qué es ser inventor: desde la creatividad hasta el marketing, las estrategias, el diseño industrial o el gráfico. También quiero montar un museo de inventos que invite a reflexionar, y con toda la documentación.
¿Colecciona usted inventos?
Nidea.
¿. ..?
Así se llama mi colección particular, porque todo el mundo reacciona igual ante los objetos: "¿Y esto qué es?". "Ni idea". Hay desde un inhalador de chocolate - cero calorías con la sensación de haberte tomado una tableta-;una báscula que te da el peso con el nombre de personajes famosos que lo comparten, hasta un filtro polarizador que se pone sobre la pantalla del ordenador y que sólo permite ver al que está sentado enfrente.
También tiene tres exposiciones itinerantes.
Funventions recoge inventos divertidos, y Futur, un tour por el futuro, por la que recibí el premio Ciutat de Barcelona en el 2006, imagina cómo será el año 2300 visto a través de los objetos cotidianos.
¿Y cómo imagina el futuro?
Un poco negro por la pérdida del individualidad y la injerencia excesiva del Estado en la vida personal.
¿Cuál será el objeto estrella?
Posiblemente el Aidop (de doparse), la medicación a través del sistema nervioso. Se le proporcionará al cerebro la información para que genere la química necesaria. Y el sistema electroestático para puertas y ventanas, que impedirá que entre el polvo en casa, se acabó fregar y barrer.
¿Siempre quiso ser inventor?
Lo que siempre he querido es que me pagaran por pensar, vender ideas.
Hacer de eso un negocio es una proeza.
He tenido que luchar mucho para que cuando voy a una empresa me escuchen, valoren la idea y la paguen. Cualquiera de los gadgets que hemos comentado sustenta una campaña de comunicación o explica con humor algo difícil de explicar.
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